Primero que nada y antes que todo, siento que lo correcto es decirles lo normal, en otras palabras, mi nombre: Jorge Luis Gálvez Vallejo. El origen de mi nombre se debe al maestro de la literatura Jorge Luis Borges, escritor al que mi padre tiene un gran afecto y admiración. Esos sentimientos se han transmitido a mi y yo también soy un fiel admirador del maestro. Originalmente mi nombre iba a ser Rogaciano...la verdad no sé por qué.
Les puedo resumir en pocas palabras que soy una persona rara. Eso se lo pueden preguntar a las personas que ya me conocen y les dirán que tengo razón. Básicamente soy una contradicción a las ideas normales que uno puede tener de una persona. Un ejemplo son mis gustos: Matemáticas y Literatura, Música y Física...cosas que uno no podría poner juntas, pero que si uno lo sabe, van juntas. Uno piensa que si uno le gustan las Matemáticas entonces no va a leer, o que si a uno le gusta leer no le gustarán las ciencias exactas...así suele pasar. Lo curioso es que en mi caso no es así, eso siempre causa una ligera curiosidad en las personas. El día que pasé al frente y hablé de mi gusto por la escritura, Ana (creo que fue ella) me preguntó por qué estudiaba entonces Ingeniería Química, mi respuesta (creo) fue: Soy raro o soy fan de todo. Pero sobre todo (musicalmente hablando) de Led Zeppelin, Sodastereo y Pink Floyd.
Layla es y será una canción que representa mi vida.
Soy una persona que, se podría decir, siempre le gusta complicarse la vida, si hay una forma fácil que todos usan yo intento encontrar la forma difícil que logró darnos esa forma fácil. Me gusta profundizar en casi todo aspecto posible. Soy curioso por naturaleza. Algo clave de mi personalidad es la pregunta y la duda. No puedo vivir sin saber algo, me causa pánico, estrés y desesperación un momento de no saber. Siempre busco aprender, por eso me encanta leer y escuchar conferencias de todo tema posible. Menos de economía. Odio la economía.
Me gusta decir que soy una persona amable, me considero caballeroso, aunque hay muchas mujeres que les gusta frustrar mis intentos de caballerosidad, pero bueno, esa podría ser otra historia. Me gusta mucho ayudar a las personas, me fascina poder brindar un poco de mi conocimiento a otros y que estos lo pidan o lo acepten (o ambas). A veces pienso que esta naturaleza mía de ayudar a las personas es la forma de justificarme, ya que yo siento que en el fondo soy una mala persona. La ayuda a los demás siempre ha sido mi pasión y más en cuanto a la enseñanza. Siento que el ser maestro podría estar en mi futuro.
Soy fiel seguidor a la Filosofía y a muchas obras cúspides de esta disciplina. Me siento muy orgulloso de mi por poder decir que ya leí la Crítica de la Razón Pura y el Ser y la Nada. Los considero unos de mis mayores logros. Algo más de mi es que, aunque ya lo dije lo repito, me encanta leer, es mi pasión y sin la lectura no sería nada (hago referencia a esto en un post dos más abajo, "Una prosa para ella", ahí podrán encontrar más de eso). Leo mucho, me he convertido en un lector rápido con el tiempo. Ya les dije que me gusta complicarme la vida, me gusta leer en otros idiomas. Puedo decir también que leí los Miserables en francés, la Divina Comedia en Italiano, las obras de Russell en inglés y obras capitales de la lengua alemana en alemán. Todas han tomado su esfuerzo y créanme, ha sido descomunal.
Soy fanático fiel a la sinestesia, la amo con todo mi ser, pues vivo sinestesias a diario. Hay una muy especial en mi que cada vez que la vivo regreso el tiempo y encuentro en él la felicidad pasada a la de ahora.
Soy honesto, a veces demasiado. A veces tiendo a herir a las personas sin querer. A veces lo noto, a veces no; siempre me disculpo. Debí ser Argentino, constantemente digo cosas en ese acento y recuerdo con añoranza mi tiempo real y ficticio en Buenos Aires. Tengo ciertas cosas que muchos les dicen: "algo muy Gálvez" y con el tiempo irán entendiendo a que se refieren las personas cuando dicen eso. Eso viene desde mi papá, él y yo somos muy parecidos en muchos aspectos y creo que toda su personalidad la heredé yo.
Odio el ruido de la aspiradora, me pueden torturar con él con mucha facilidad (no lo hagan). Soy amante loco de la puntualidad y vivo en la constante queja de la puntualidad mexicana. No puedo vivir sin mi reloj, me desespera el hecho de no saber la hora al ver mi muñeca. La vez que mi reloj se quedó sin batería pedí prestado uno pues ya no podía seguir así. Me gusta hacer ejercicio, me entretiene mucho pero a veces no encuentro el tiempo para hacerlo, pero normalmente lo intento. Soy enemigo de correr, pero este año planeo derrotarlo para siempre y decir que corro. Me gusta el frío, mucho. El frío me trae muchos recuerdos agradables y siempre soy ligeramente más feliz en clima frío. Creo también firmemente que la respuesta a todo es 42 y sé perfectamente donde está mi toalla*.
Básicamente, para que todos entiendan, soy un hombre raro. Y firmemente creo que sólo hay una persona en este planeta que me entiende.
*"A towel, it says, is about the most massively useful thing an interstellar hitch hiker can have."
